¡Todo el apoyo a la insurrección en Haití! ¡Fuera Ariel Henry y no a la injerencia imperialista!

Los trabajadores y explotados de Haití están en las calles del país realizando multitudinarias manifestaciones, en una nueva insurrección popular, en este país que es ejemplo de resistencia contra los ataques del imperialismo y la burguesía local. La mayoría de la población de Haití sigue padeciendo hambre, desempleo, insalubridad y pésimas condiciones laborales, además de inseguridad social y falta de inversión en educación, salud y vivienda.

Internacionales - October 28, 2022

Los trabajadores y explotados de Haití están en las calles del país realizando multitudinarias manifestaciones, en una nueva insurrección popular, en este país que es ejemplo de resistencia contra los ataques del imperialismo y la burguesía local. La mayoría de la población de Haití sigue padeciendo hambre, desempleo, insalubridad y pésimas condiciones laborales, además de inseguridad social y falta de inversión en educación, salud y vivienda.

Hace más de un año, tras el asesinato del dictador Jovenel Moïse, el gobierno de facto es de Ariel Henry, quien se hace llamar presidente, pero es un gobierno ilegítimo, que mantiene y profundiza la masacre contra la mayoría del pueblo haitiano. En otras palabras, las bases de las movilizaciones son objetivas y sólo la profundización de la insurrección, en una revolución socialista, con el poder en manos de los trabajadores, puede liberar a los haitianos del caos capitalista.

Los manifestantes haitianos se enfrentan a diario contra el gobierno ilegítimo y sus tropas de represión, y muchos activistas han sido asesinados o arrestados. Aun así, las peleas no cesan y Ariel Henry cada vez tiene menos capacidad para gobernar. Los combatientes ya controlan territorios del país, incluso donde están instaladas las zonas francas, instaladas por el imperialismo en Haití para saquear el país, produciendo sin pagar impuestos, con trabajo semiesclavo y obteniendo altísimas ganancias.

En otras palabras, existe en el país un poder dual concreto en este momento, contraponiendo el poder burgués expresado en la ausencia de un Congreso, una Corte Suprema y un presidente ilegítimo, que nunca fue elegido por el pueblo, versus un poder obrero, popular y campesino que se impone en las calles, ocupa fábricas y edificios públicos y exige la destitución inmediata de todos los enemigos de los trabajadores. En este momento, necesitamos apoyar y fortalecer este embrión de poder de los explotados, desarrollando un movimiento aún más fuerte para derrocar al actual gobierno y régimen, y construyendo un gobierno de los explotados y oprimidos.

Los enemigos de la gran mayoría del pueblo son muy claros: empresarios mineros, grandes comerciantes, banqueros e industriales. Pero por encima de todos ellos están las multinacionales y los intereses del imperialismo, especialmente de Estados Unidos. Son los que apoyaron la dictadura de Jovenel y todos los gobiernos que masacraron al pueblo en los últimos años. Y son los mismos que apoyan el gobierno ilegítimo de Ariel Henry, incluso redactando, desde el exterior, una nueva Constitución para Haití, y ahora planificando una nueva intervención militar, para sofocar el ímpetu revolucionario de las masas.

Los trabajadores y explotados de Haití no aceptan que esto continúe, y quieren mejores condiciones de vida y rescate de su soberanía e independencia nacional. Estamos con este pueblo movilizado, sin ilusiones en ninguna salida burguesa o patronal. También se necesita apoyo incondicional para los inmigrantes haitianos en República Dominicana y otros países donde tienen que refugiarse.

Para la victoria de los luchadores haitianos, el gran obstáculo es la ausencia de la dirección revolucionaria, por la inexistencia de una organización de la clase obrera con programa anticapitalista y en defensa de la revolución socialista. No existe una organización con influencia de masas con este perfil, y urge multiplicar las luchas por el derrocamiento del gobierno y defender la toma del poder en base a un programa económico, político y social revolucionario, de carácter obrero, popular y campesino.

– ¡Abajo el gobierno de facto e ilegítimo de Ariel Henry!

– ¡Fuera todo tipo de presencia y control imperialista en Haití! ¡No a ninguna nueva ocupación extranjera!

– Que el pueblo haitiano, libre, movilizado y organizado, decida su propio destino– Por un Frente Socialista Revolucionario isleño.