POR LA SALIDA INMEDIATA DE BRASIL DEL CORE GROUP, CUYA PRESENCIA EN HAITI LECCIONA SU SOBERANIA E INDEPENDENCIA NACIONALES.
La inmensa mayoría de los trabajadores y demás sectores de masas brasileñas ignoran el papel contrarrevolucionario jugado por las Fuerzas Armadas del país bajo la envoltura de “misiones de paz”. Tampoco sabe que hubo miles de millones de reales gastados, tanto en el financiamiento de la ONU, como en preparar, armar y mantener sus tropas en territorios ajenos.
Internacionales - August 7, 2021

La inmensa mayoría de los trabajadores y demás sectores de masas brasileñas ignoran el papel contrarrevolucionario jugado por las Fuerzas Armadas del país bajo la envoltura de “misiones de paz”. Tampoco sabe que hubo miles de millones de reales gastados, tanto en el financiamiento de la ONU, como en preparar, armar y mantener sus tropas en territorios ajenos.
Este año, el presupuesto militar recibirá aún más miles de millones que el pasado, mientras los sectores educación, salud, medio ambiente, agua y demás inversiones sociales reciben incrementos pírricos en relación a las necesidades que padecen las amplias masas brasileña. Ni hablar de la falta de interés de Bolsonaro y gobiernos locales en atacar las raíces y efectos del COVID entre los desposeídos de la nación. Así, invertir en ocupar y matar en el estranjero es aún más inaceptable.
Entendemos que la presencia de las tropas militares brasileñas fuera de sus fronteras es parte de una política contrainsurgente a la cabeza de la cual están las grandes naciones imperialistas, encabezadas por Estados Unidos, Unión Europea, Canadá y otras. El gobierno de Brasil y otros del continente hacen coro al poder imperialista.
La envoltura que legitima la intervención de los aparatos militares en otras naciones se llama ONU.
Ahora que cientos de miles de ciudadanos de Haití vienen a Brasil en calidad de inmigrantes, es fundamental recordar los crímenes cometidos por la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah) entre 2004 y 2017.
Sabemos que la MINUSTAH llegó a territorio haitiano bajo la batuta militar de Brasil y que sus respectivos gobiernos integraron a la misión más de 37 mil soldados. En total, once generales brasileños estuvieron al frente de la ocupación.
También fue el gobierno brasileño quien propuso a EEUU, Francia y Canadá, cuyas tropas llegaron a Haití después del golpe de estado contra Aristides, que las mismas fueran sustituidas por militares de la ONU para lavar el rostro intervencionista de las naciones imperialistas que actuaron a su propio nombre.
En ese momento estaba en la presidencia el dirigente del PT Luiz Inácio Lula da Silva quien de hecho colaboró con el plan imperialista. Lula, sabiendo que Brasil tenía una larga historia de participación en misiones militares de la ONU, fue uno de los liderazgos de este ataque a los haitianos.
Fuera Bolsonaro. Retiro inmediato de Brasil del Core Group. Que el pueblo haitiano decida democraticamente su destino.
Tras la retirada formal de la MINUSTAH de suelo haitiano dejando una secuela de crímenes, delitos, violaciones sexuales, enfermedades y a las grandes masas en peores condiciones, la presencia imperialista ahora se mantiene bajo la mascarada de Core Group.
El Core Group está formado por los embajadores de EE.UU., Francia, España, Brasil, Alemania, Canadá, la UE, así como los representantes de la ONU y de la OEA. En realidad, es un instrumento imperialista para consensuar la política y planes que ayuden a mantener y ampliar sus intereses en Haití y toda la región.
En ese contexto, hay que dejar el Core Group inmediatamente. La presencia de Brasil en ese aparato compromete al pueblo brasileño en acciones que afectan la soberanía e independencia nacionales de Haití y otras naciones.
No es de ahora que los gobiernos brasileños, dictatoriales, democráticos parlamentaristas, “progresistas”, reformistas o populistas se entregan en cuerpo y alma a los planes de los distintos gobiernos imperialistas. Brasil ha participado en más de 50 misiones aportando unos 55 mil militares, policías y asesores vestidos de civiles. Desde Angola, Mozambique, Timor-Leste, Líbano, Sudán del Sur, Sáhara Occidental, República Democrática del Congo, Adyel, Lémen y hace tiempo en Haití.
No tenemos ideas, porque es secreto de estado, cuántos millones de reales se gastan en tales “misiones de paz”. Tampoco de las atrocidades cometidas impunemente. De 50 soldados brasileño enjuiciados por delitos cometidos en Haití, apenas dos fueron condenados, por ejemplo.
Por lado, lado, la preparación militar que reciben estos soldados para misiones internacionales al regresar, sirven a gobiernos como el de Bolsonaro, para operaciones internas. El primer evento significativo ocurrió en 2010, con la ocupación militar del Complexo do Alemão, bajo el alegado objetivo de “pacificar” esa enorme región de favelas en la zona norte de Río de Janeiro. En 2014 las fuerzas militares intervinieron en el Complexo da Maré, otra extensa área de favelas cariocas.
Y cuatro años después se dispuso la intervención militar del estado de Río de Janeiro, la cual se extendió hasta después del inicio de la actual gestión. Las dos primeras operaciones internas de “guerra contra el pueblo” fueron llevadas adelante por los gobiernos del PT y la última por el gobierno Temer, que fue vicepresidente de Dilma.
El ordenamiento legal que permitió la participación de las fuerzas armadas en cuestiones de seguridad interior constituye las llamadas operaciones de Garantía de la Ley y el Orden (GLO), y hacen parte de un plan de represión impuesto desde el gobierno Lula, que incluye la Ley Antiterrorista para amenazar los movimientos sociales, además de crear la Fuerza Nacional de Seguridad con el mismo objetivo.
Hay que romper este plan y terminar la participacíon de Brasil en las acciones violentas del imperialismo. En consecuencia, proponemos a todos los luchadores y luchadoras del país lo siguiente:
– DEFENDER AL PUEBLO HAITIANO. DENUNCIANDO LA PRESENCIA DEL GOBIERNO DE BOLSONARO EN EL CORE GROUP Y DEMANDAR SU RETIRO DE INMEDIATO.
– NI UN REAL PARA LA ONU Y PREPARACION DE SOLDADOS, POLICIAS Y AGENTES.
– LLAMAMOS A TODAS LAS PERSONALIDADES Y GRUPOS QUE DICEN COLOCARSE AL LADO DEL PUEBLO HAITIANO A EXIGIR EL RETIRO DEL CORE GROUP.
– SOLIDARIDAD CON LOS IMIGRANTES QUE LLEGAN A BRASIL DESDE HAITI HUYENDO DE LA CRISIS QUE IMPONEN LAS NACIONES IMPERIALISTAS Y LOS GOBIERNOS CORRUPTOS Y CRIMINALES.
– QUE EL PUEBLO HAITIANO DECIDA SU PROPIO DESTINO.
Agosto del 2021
Movimento Revolucionario Socialista