¡Las centrales sindicales y partidos de “izquierda” contra convocar actos de protesta!

En medio de la peor pandemia mundial en un siglo, y el mayor número de muertos en Brasil desde la llegada de los europeos, a nadie le gustaría exponerse en las calles, cuando deberíamos poder ejercer nuestra cuarentena y proteger nuestras vidas. Sin embargo, desafortunadamente, gobiernos e instituciones como la policía y el Congreso, en diferentes países, siguen asesinando a negros inocentes, recortando salarios y aumentando nuestra carga de trabajo.

Por lo tanto, independientemente de si queremos esta situación, no tenemos otra alternativa que luchar, ¡y el único terreno real para la lucha de los trabajadores es en las calles!

Sin embargo, centrales sindicales brasileñas como CUT y CTB, así como los partidos que las controlan, PT y PCdoB, votaron por no participar en ningún acto callejero, alegando que esto puede empujar al gobierno de Bolsonaro, a quien temen y tiemblan desde antes de llegara al gobierno, a tomar medidas dictatoriales.

A pesar de este derrotismo de esta “izquierda”, los trabajadores realizaron manifestaciones con millones en las calles el 15 y 30 de mayo de 2019 en defensa de la educación, una huelga general en junio y grandes manifestaciones en defensa de la Amazonia poco después, además de las innumerables huelgas y protestas durante el primer año del mandato de Bolsonaro.

Ahora, cuando el gobierno es más débil y pierde popularidad cada día, las centrales sindicales vienen al rescate y les dicen a los trabajadores que se crucen de brazos ante los ataques y no abandonen sus hogares para luchar. Sin embargo, estos mismos partidos, PT y PCdoB, donde son gobierno, como en Maranhão, Ceará, Bahía, Rio Grande do Norte, permiten la apertura de tiendas, centros comerciales y aglomeraciones de todo tipo. Para todas los partidos, puede irse de casa al trabajo. Para protestar, no.

Desafortunadamente, incluso Conlutas, la central que construimos, que es controlada por PSTU y corrientes  del PSOL, estuvo en contra de convocar la lucha en las calles. En una reunión el 5 de junio, nosotros del MRS presentamos una resolución que defiende la necesidad de aumentar las luchas que ya están teniendo lugar en Brasil, que están se multiplicando por el mundo y que los sectores revolucionarios deben disputar e invocar.

Sin embargo, esta resolución fue derrotada por 22 votos contra 2, con solo el representante de MRS y el de CST (corriente del PSOL) a favor. Todas las demás corrientes del PSOL, sectores como el sindicato nacional de docentes universitarios (ANDES / SN) y especialmente el PSTU, estuvieron en contra de la movilización de los negros, las mujeres, el movimiento popular, la juventud y todos los trabajadores, alegando que ahora no es tiempo para eso.

La obligación de los revolucionarios es señalar el camino a las masas y estar con ellas en luchas decisivas como esta, y no detrás de ellas, sin luchar hasta que la lucha los arrastre como “remolque”, muchas veces después que el destino de la lucha ya se perdió. Perdimos el voto; ¡pero ganaremos las calles!

Abajo, presentamos nuestra resolución, hecha 2 días antes, aún sin actualizar los datos sobre muertes e infecciones (que pasaron de 31 mil a 35 mil muertos, lo que equivale en poco más de 2 meses al número de muertes en 2 años de la gripe española en Brasil).

“¡Pelear es un servicio esencial!

Considerando que:

1) Vivimos en una terrible pandemia que ya ha causado más de 31 mil muertes en Brasil, que se acerca al segundo lugar en el mundo en número de muertes, con Brasil siendo el triste primer lugar en el ranking diario de muertes durante más de una semana.

2) Debido a que no hay vacuna, cura, tratamiento específico y ni siquiera suficientes trabajadores de salud, hospitales, camas y ni siquiera respiradores y EPP, la cuarentena es esencial para contener el contagio y “aplanar la curva” de los pacientes que necesitan atención.

3) Sin embargo, la cuarentena tiene que ser garantizada pagando para que los trabajadores puedan adoptar la medida y quedarse en casa. Sin ingresos garantizados del gobierno y estabilidad laboral sin salarios reducidos, las personas necesitan salir de casa para obtener más recursos, y no es posible insistir en que se queden en casa.

4) Hay alrededor de 80 millones de desempleados, desalentados, subempleados, informales o trabajadores liberales en Brasil. Todos deberían tener derecho a recibir ayuda de emergencia. Sin embargo, menos de 60 millones de brasileños fueron aprobados para recibir la ayuda, y hay más de 100,000 militares aprobados irregularmente y otros fraudes en el medio de estos números, aumentando aún más el número de aquellos que deberían recibir la ayuda y hasta ahora ni siquiera han sido aprobados.

5) El período de recepción de la ayuda, por solo 3 meses, es absolutamente imposible para garantizar la supervivencia de las familias más pobres.

6) El monto de US$ 120 es completamente insuficiente, y si se extiende el beneficio, como se piensa hacer, es probable que sea aún más bajo.

7) Si bien los trabajadores están llamados a quedarse en casa, pero no se les da ninguna condición para poder ejercer su derecho a la cuarentena, la presión de los empresarios significa que todos los gobernadores y el gobierno de Bolsonaro, a pesar de las diferencias en los discursos, están promoviendo la reapertura de toda la economía. Todos ellos son culpables. Los gobernadores de todos los partidos hablan en cuarentena, pero abren centros comerciales, tiendas, bancos, fábricas y más y más actividades.

8) El Congreso y el gobierno de Bolsonaro continúan con sus agendas de ataques a los trabajadores, sin ninguna resistencia en las calles, como en la aprobación de los decretos que reducen los salarios, congelan los ajustes a los servidores públicos, imponen un aumento en las horas de trabajo bancario, etc.

9) En la práctica, la policía continúa matando jóvenes negros, incluso dentro de sus hogares; Los bolsonaristas continúan reclamando medidas autoritarias y antipopulares en sus manifestaciones; y el trabajo ya se está reanudando, criminal y absurdamente, en todas las esferas. La cuarentena que queremos no es efectiva; y la “cuarentena” de los gobiernos, cada vez más, sirve como argumento solo para evitar que salgamos a luchar.

10) Millones de trabajadores nunca han sido puestos en cuarentena, ya que son servicios esenciales (salud, seguridad, alimentos, industrias, supermercados, farmacias, combustible, bancos, transporte, prensa …) y prácticamente todos los demás se ven obligados a regresar ahora, aunque estamos en contra de este regreso.

11) Si nos envían a las calles a trabajar, ¡podemos y también debemos ir a las calles a luchar!

12) Las contra-manifestaciones ya han aparecido, más o menos espontáneamente, para oponerse a las actividades bolsonaristas. Estos actos, inicialmente convocados por algunos sectores de partidarios organizados y grupos llamados antifascistas, ya han ocurrido en más de una ocasión y están recibiendo el apoyo de más y más ciudades y activistas.

13) En Manaos, una de las ciudades más devastadas por la pandemia, hubo una gran manifestación con ejes políticos aún más avanzados, alrededor de la bandera de Fuera Bolsonaro, con acciones para garantizar la supervivencia de los trabajadores y combatir la pandemia.

14) Estos actos tienden a generalizarse junto con la generalización de las deudas, la falta de dinero y la creciente polarización social a medida que continúan la pandemia y la crisis.

15) En los Estados Unidos, un país con un récord absoluto de casos de Covid (¡casi 2 millones!) Y plagado por la mayor tragedia mundial de Covid-19, con más de 108 mil muertos, decenas de miles de personas salen a las calles para protestar contra el racismo, a pesar del riesgo de contagio. Esto se debe a que no se puede controlar el momento en que los agentes de policía blancos torturarán y matarán a una persona negra, ni podremos sentarse de brazos cruzados en casa esperando que pase la pandemia (quién sabe cuándo) para reaccionar.

16) En Francia, las multitudes salieron a las calles en memoria de George Floyd y contra el racismo en Francia y en todo el mundo. Esto también sucedió en el Reino Unido, Holanda, Sudáfrica e innumerables países en una ola mundial de luchas.

17) En el Líbano, desde hace mucho tiempo, las masas han reanudado un proceso insurreccional de lucha en las calles, en defensa de sus condiciones de vida y contra el gobierno.

18) En Brasil, la crisis política del gobierno de Bolsonaro nunca ha sido mayor (con el Congreso, la Corte Suprema, la prensa, ex ministros, etc.), su popularidad nunca ha sido tan baja y el momento es el más propicio y necesario para que tengamos luchas para derrotar a este gobierno y sus ataques.

19) Solo la lucha cambia la vida y la clase trabajadora y la juventud en las calles son el elemento que falta para desbloquear el proceso de derrocar a Bolsonaro, o, al menos, agravar su debilitamiento y evitar que pueda seguir atacándonos.

Nuestra entidad resuelve:

1) Mantener la lucha por el derecho a la cuarentena real. No reabrir centros comerciales, tiendas, fábricas, oficinas, gimnasios, iglesias y cualquier otro servicio no esencial o facilitar el contagio.

2) Exigir medidas aún más estrictas cuando la propagación de la enfermedad está fuera de control y / o el sistema de salud ya está colapsado o avanzando hacia él.

3) Apoyar la promulgación de un bloqueo nacional de 30 días para salvar vidas y frenar el récord de muertes y contagios.

4) Intensificar la presión para que la ayuda de emergencia sea para todos los que la necesitan, sin burocracia; extender el pago hasta diciembre; aumentar el monto a US$ 400 mensuales.

5) Luchar por la revocación de todos los despidos realizados, con el sueldo pagado por las empresas o, en incumplimiento de sus compromisos, la nacionalización de cada empresa que despide.

6) Luchar por la revocación de la posibilidad de suspender los contratos de trabajo con salarios reducidos o reducir las horas de trabajo con el mismo efecto. Vetar cualquier reducción de derechos.

7) Si el trabajo de todos no está garantizado, con los mismos salarios y derechos; y sin ingresos para todos los trabajadores informales o sin empleo; Defendemos que los trabajadores luchen por su supervivencia en las calles, donde es el ambiente de nuestra clase.

8) Reforzar todas las medidas preventivas y de seguridad recomendadas y orientar que cada demostración trate de respetar la distancia entre sus miembros, que todos usen máscaras, etc.

9) De esta forma, adhiérase, sume y convoque todos los actos llamados antifascistas que ocurren en todas las ciudades donde existen.

10) Junto con todos los sectores dispuestos a luchar contra el gobierno y cualquier medida neoliberal o autoritaria, convoque actos locales donde aún no existan.

11) Mostrar solidaridad y adherirse a todos los actos por las diferentes luchas de los trabajadores (una empresa que cierra sus puertas, un joven que recibe un disparo de la policía, trabajadores de la salud que exigen condiciones de trabajo, etc.).

12) Desarrollar y adherirse a los actos generales contra el gobierno, donde nuestro estandarte principal es Fuera Bolsonaro / Mourão, aunque estos actos pueden ser más amplios. Lo fundamental es que nos permiten la libertad y la independencia política y que están alrededor de las banderas de la lucha de los trabajadores.

13) Convocar, junto con las otras centrales y movimientos sociales, un gran día de lucha y manifestaciones de Fuera Bolsonaro / Mourão para el 26 de junio.

Si no se nos garantiza el derecho a la cuarentena, ¡ocuparemos las calles en busca de salud, trabajo, derechos e ingresos!

¡Paremos todo! ¡El 26 es el día para luchar en las calles! ¡1 día de lucha para luchar por 30 días de cuarentena de verdad!

Contra la pandemia, ¡días de lucha en las calles para poder permanecer los otros días cuidándose en casa!Fuera Bolsonaro /Mourão ”