¡Estados Unidos en llamas contra el racismo del capitalismo!

George Floyd, un hombre negro de la ciudad de Minneapolis en los Estados Unidos, fue asesinado por Derek Chauvin, un policía blanco de la misma ciudad. La escena repugnante, filmada en teléfonos celulares de personas que vieron el asesinato, muestra a un policía durante más de 8 minutos torturando a George Floyd con una rodilla aplastándole el cuello hasta completar la asfixia. Mientras tanto, otros 3 policías observaban la escena ayudando a Derek, contenendo a la población y dejandole libre para torturar y matar. ¡Los 4 policías son asesinos! Pero esta escena tiene lugar en todas las ciudades importantes de los Estados Unidos. Y en todo el mundo. ¡El racismo filmado en Minneapolis es la cara del capitalismo!

George Floyd fue detenido por la policía, esposado, golpeado, torturado y asesinado, acusado de usar un billete falso de $ 20 en un supermercado. 3 de los policías asesinos están libres casi 1 semana después de su crimen. Solo Derek, el autor directo de la tortura y ejecución de George, fue arrestado, pero acusado solo de homicidio involuntario, sin intención de matar. Este es otro crimen, esta vez de impunidad. La policía mata y la justicia cubre. Los autores de los crímenes son los mismos: agentes públicos del estado capitalista.

Las protestas se han multiplicado en ciudades enteras de los Estados Unidos desde el principio, y no pueden parar. ¡No es solo por 20 dólares! Es por la vida de George Floyd y por los millones de negros golpeados, explotados y asesinados por la policía, la justicia y los gobiernos de todas partes. ¡No más! Malcom X ya ha dicho que no hay capitalismo sin racismo, y él mismo luego fue asesinado por racistas capitalistas.

El capitalismo quita cada vez más derechos, despide, reduce los salarios y destruye la vida de todos los trabajadores. Y los negros son los primeros en ser despedidos, desalojados de sus hogares; y encarcelados o asesinados cuando luchan contra cualquier injusticia, o simplemente cuando son inocentes y están parados, sacados de sus autos para ser torturados y ejecutados cruelmente como lo fue George.

El racismo es estructural, inherente al capitalismo, tortura y mata a los negros todos los días. ¡La única salida es salir a la calle y enfrentar todo el sistema capitalista! Y eso es lo que está sucediendo en este momento en varios estados de los Estados Unidos. Los manifestantes prendieron fuego a autos de policía, estaciones de policía, así como a tiendas y símbolos de racismo, como los edificios de CNN, una emisora ​​que reproduce el racismo.

Los cócteles molotov explotan en coches de policía racistas, y desde Los Ángeles hasta Nueva York el capitalismo tiembla cuando millones dicen que ya no aceptarán ser masacrados en silencio. En Nueva York, las protestas cerraron las carreteras principales en Harlem, el tradicional barrio negro de la ciudad, y en Union Square, donde generalmente se realizan manifestaciones en la ciudad. Por otro lado, los asesinos uniformados arrestaron a más de 200 manifestantes, lo que demuestra que están del lado de Derek, el asesino de Minneapolis.

El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, criticó el asesinato de George Floyd pero hace que la policía golpee y arreste a quienes salen a la calle para poner fin al racismo. En Minneapolis, donde ocurrió el caso, hay nuevas protestas todos los días, pero el gobierno de Minnesota, el estado donde se encuentra Minneapolis, llamó a la Guardia Nacional por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial para contener las manifestaciones. El gobernador Tim Waltz ordena a la policía que haga lo que hizo Derek y que ataque a la población en las calles. Donald Trump también dijo que ante las protestas, a las que llama “saqueos”, es hora de que la policía dispare contra los manifestantes.

La salida es por la “extrema izquierda”

El fiscal general de los Estados Unidos, William Barr, dijo que las protestas que se extendieron por todo Estados Unidos están infiltradas por grupos anarquistas y de extrema izquierda. Barr también dijo que los miembros de estos grupos estaban cometiendo un “crimen federal” por cruzar las fronteras de los estados estadounidenses para promover protestas violentas. “En muchos lugares, parece que la violencia es planificada, organizada y dirigida por grupos anarquistas y de extrema izquierda, utilizando tácticas de Antifa para promover la violencia”. El presidente Trump también atribuyó las protestas a “saqueadores y anarquistas”.

Los verdaderos saqueadores son Trump, gobernadores, congresistas y grandes empresarios, que se benefician del racismo y la masacre de negros, desde que llegaron los primeros barcos cargados de esclavos a Estados Unidos. La violencia siempre ha venido de la clase dominante, que diezmó a los pueblos indígenas del país y mató a millones de trabajadores en la Guerra Civil, cuando, incluso poniendo fin a la esclavitud, solo “liberaron” a los negros para que tuvieran más soldados que matar por los intereses de los blancos, y los mantuvieron esclavizados económicamente. Luego, en cada guerra en la que Estados Unidos invadió países, la historia se repitió, y los negros fueron arrojados a morir en Vietnam, Irak, Afganistán, etc.

¡El capitalismo es el que es violento! No satisfechos con matar a George Floyd, mataron a otro joven de 19 años en las protestas de Detroit después de que la policía asesina disparó balas letales en una protesta. Eso es lo que hacen al pedirles a los manifestantes que sean pacíficos.

La paz que quieren los capitalistas es la paz de los cementerios. Pero lo que las masas les están dando y necesitan dar aún más es el odio de clase y la violencia de los oprimidos como defensa contra la violencia de los opresores. Y no es suficiente salir a la calle para protestar desarmados. Como enseñaron las Panteras Negras, todas las personas pueden y deben reaccionar armadas contra la violencia del racismo y la burguesía.

Unos 1.700 agentes de la Guardia Nacional fueron enviados a Minneapolis para ayudar a la policía a reprimir las protestas. Ese número se une a los 2.500 oficiales de policía de Minnesota en la región. Es la mayor movilización de la policía en el estado desde 1929. El alcalde Jacob Frey ya impuso el toque de queda y ordenó a las personas que vaciaran las calles de 8:00 p.m. a 6:00 a.m., a excepción de los miembros de la Policía y la Guardia Nacional, los bomberos y los equipos médicos. Esta es la libertad que ofrece el capitalismo a quienes se atreven a reaccionar.

Y la única forma de evitar que la policía asesine a más Georges Floyds es mediante una uma salida revolucionaria para destruir el capitalismo y construir un gobierno de los explotados. Tomar el poder en los Estados Unidos es muy difícil, ya que el imperialismo estadounidense posee el arsenal de guerra más grande del mundo. Pero las docenas de ciudades en llamas en los Estados Unidos muestran que este sistema ya está podrido. Y millones de negros, mujeres, latinos, inmigrantes en general, y también trabajadores blancos y jóvenes en general están señalando que se necesita una ruptura política.

Obama fue un presidente negro y nada ha cambiado sobre el racismo. Ya sea demócrata o republicano, cualquier presidente gobierna para grandes compañías, controladas por blancos, que se benefician del racismo. En las elecciones, nada ha cambiado o cambiará. El camino es justo en las calles, y la salida es caminar para donde Trump, el fiscal general, CNN, FoxTV y toda la burguesía más temen: ¡a la extrema izquierda!

Si la extrema izquierda son aquellos que se niegan a votar por Biden o Trump en las elecciones dentro de 6 meses, y que se niegan a seguir muriendo sin luchar, entonces somos la extrema izquierda. Y el momento del cambio es ahora. Pero si bien es justificable y progresivo, solo destruir autos de policía y prender fuego a las tiendas no resolverá nada. Es una inmensa energía popular para no destruir ninguna base del sistema capitalista ni construir alternativas.

Es necesario organizar comités populares y de lucha en cada ciudad, junto con comités de autodefensa que protejan a los manifestantes y la población contra la policía. Y, juntos, los comités de lucha y autodefensa deben presentar un programa anticapitalista, socialista y revolucionario, para expropiar a la burguesía, disolver la policía y acabar con el racismo y el capitalismo.

La muerte de George Floyd no puede pasar en vano. Y los vientos de Minneapolis ya han comenzado a soplar.