Diputados aprueban proyecto de ley de Bolsonaro para la privatización del servicio postal

La Cámara de Diputados aprobó por 286 votos, contra 172 votos y 2 abstenciones, el Proyecto de Ley (PL) 591, que permite la privatización de la Empresa de Correos de Brasil. Ahora, el Senado votará el asunto en dos rondas, que deberían realizarse en noviembre. La privatización de Correos es un crimen contra Brasil y un ataque violento contra los trabajadores de la empresa y la mayoría de la población, especialmente los más pobres.

Internacionales - August 10, 2021

La Cámara de Diputados aprobó por 286 votos, contra 172 votos y 2 abstenciones, el Proyecto de Ley (PL) 591, que permite la privatización de la Empresa de Correos de Brasil. Ahora, el Senado votará el asunto en dos rondas, que deberían realizarse en noviembre. La privatización de Correos es un crimen contra Brasil y un ataque violento contra los trabajadores de la empresa y la mayoría de la población, especialmente los más pobres.

El gobierno de Bolsonaro prometió en su campaña electoral que privatizaría todo lo que pudiera. Posteriormente, negó varias veces que pudiera vender la Empresa de Correos. Mintió todo el tiempo. El gobierno no pudo vender casi nada en estos casi 3 años de mandato, debido a la lucha de los trabajadores, la oposición de la mayoría de la población y su propia debilidad política.

Pero lo que se vendió fue a precio de ganga, con un aumento de los precios al consumidor y un empeoramiento de la calidad del servicio. La venta de los Correos, además de demuestrar las mentiras de Bolsonaro una vez más, será un desastre en todos los sentidos, repitiendo todo lo que ya salió mal en otras privatizaciones y cediendo el control de un servicio estratégico desde el punto de vista social.

El gran discurso para justificar la privatización es que Correos ya no podría atender a la población, provocando pérdidas y daños al país. ¡Una completa mentira! Apenas el año pasado, la ganancia de Correos fue de US$ 300 millones, incluso frente a la pandemia, con una gran parte de los empleados en licencia, por comorbilidades, en trabajo remoto.

Sumado al déficit histórico de empleados que fueron despedidos en los diferentes planes de despido presentados por diferentes gobiernos, la pandemia agravó el problema y no había suficientes trabajadores para atender esa demanda.. Y aun así, Correos continúa obteniendo ganancias y brindando un mejor servicio que las empresas privadas de paquetería.

Más de diez años sin contrataciones, despidos y precariedad: un plan para privatizar.

Desde 2011, no hay más selección de nuevos empleados en Correos. Dilma permaneció unos 6 años, Temer otros 2 años y medio y Bolsonaro otros 2 años y medio, y no hubo reemplazo de empleados. Desde entonces, el servicio postal ha aumentado el número de paquetes entregados, cartas y telegramas enviados y todo tipo de nuevos servicios electrónicos asimilados por la empresa, y el número de empleados solo ha disminuido.

Además de los que se jubilaban sin ser reemplazados, ¡solo los diversos planes de despido llevados a cabo por Correos provocaron un déficit de alrededor de 40 mil empleados! En 2010 también se aprobó la Medida Provisional 532, transformada en ley y sancionada por el ex-presidente Lula, que permitió a Correos abrir su capital en la bolsa. ¡O sea, estos 10 años de medidas de los gobiernos del PT, MDB y Bolsonaro prepararon el terreno para la privatización!

Pero la venta de Correos, una empresa con más de 200 años de funcionamiento, y siempre muy bien valorada por la población, aún necesitaba que la población cambiara de opinión y tuviera una visión de que los Correos no funcionan. Este plan se puso en marcha con una importante campaña de prensa en defensa de la privatización y la falta de inversión y contratación de empleados, lo que provocó retrasos deliberados y premeditados en las entregas de correo.

De hecho, tanto desguace ha provocado problemas en la Empresa. ¡Pero la solución es contratar a través de selección pública para reemplazar a los empleados despedidos! La privatización entregará una empresa experimentada y con servicios en todo Brasil a algun amigo del gobierno, y los precios cobrados a los clientes se multiplicarán muy por encima de la inflación, y los pueblos pequeños y los barrios pobres de las grandes ciudades no tendrán más servicios prestados, ya que no generan ganancias.

El gobierno de Bolsonaro y el corrupto Congreso (Cámara y Senado) están cometiendo un crimen histórico, que podrá dejar sin empleo a 100.000 trabajadores, aumentar el costo de los bienes y generar un apagón de comunicaciones en cientos de ciudades brasileñas.

¡Los Correos son del pueblo! ¡Huelga nacional contra la privatización! ¡Fuera Bolsonaro!

Estamos ante un gobierno débil, que ha enfrentado cada vez más protestas en las calles, y es cada vez más evidente que está involucrado en muchos escándalos de corrupción. Bolsonaro es un presidente criminal y la entrega de los Correios es parte de su política para destruir el servicio público y que se brinda a los más pobres, para beneficiar a las bandas empresariales que rodean a su gobierno.

Todos sabemos que, si depende de los votos del Senado, se completará la privatización. Todos los partidos están comprometidos con los grandes negocios, incluidas las grandes empresas del sector de paquetes, y la burguesía quiere saquear los Correios entre ellos. Asimismo, si bien es correcto interponer demandas para bloquear privatizaciones y apelar hasta la Suprema Corte, el Poder Judicial tampoco garantizará a la empresa postal estatal y pública. Solo la lucha de la clase trabajadora puede evitar la privatización.

Es hora de que las federaciones y sindicatos de Correos preparen una gran lucha nacional en defensa de la Empresa de Correos. ¡La huelga de categoría debería lanzarse en los próximos días! Tenemos que demostrar que la mayor fortaleza que tenemos es paralizar las actividades. Junto con la huelga, se necesita una gran campaña para denunciar la privatización y su daño a la población, con actos de calle, ocupación de edificios, debates con la población y protestas radicalizadas en Brasilia. ¡La acción directa de trabajadores y trabajadoras es la única forma de derrotar la privatización, uniendo a los trabajadores postales y otros sectores!