¿Correos de Brasil: lugar de trabajo o prisión?

No es nuevo que los mecanismos creados por los gobiernos y sus gestores vengan con el objetivo de masacrar a todos los trabajadores. Ahora, las victimas son los OTTs (Operadores de Cribado y Transbordo) de Correos. No hay concurso público desde 2011, la aprobación del Proyecto de Ley 532 eliminó derechos fundamentales, sufrimos la privatización del plan de salud, nuestro plan de pensiones (Postalis) fue robado y está casi quebrado, y la tercerización ha reducido el número de empleados propios de la empresa y los reemplazó por sustitutos sin derechos laborales.

Sindical - April 29, 2022

No es nuevo que los mecanismos creados por los gobiernos y sus gestores vengan con el objetivo de masacrar a todos los trabajadores. Ahora, las victimas son los OTTs (Operadores de Cribado y Transbordo) de Correos. No hay concurso público desde 2011, la aprobación del Proyecto de Ley 532 eliminó derechos fundamentales, sufrimos la privatización del plan de salud, nuestro plan de pensiones (Postalis) fue robado y está casi quebrado, y la tercerización ha reducido el número de empleados propios de la empresa y los reemplazó por sustitutos sin derechos laborales.

Los gobiernos del PT de Lula y Dilma implementaron la mayoría de estos ataques, que fueron seguidos por la Reforma Laboral y la extinción de la actividad de tratamiento, bajo el gobierno de Temer. Con Bolsonaro, la Reforma Previsional ha avanzado aún más en la eliminación de derechos históricos, además de los Correos estaren bajo constante amenaza de privatización.

Pero, por si fuera poco, desde hace un tiempo, los generales que dirigen Correos se están superando en el acoso y la presión sobre la categoría. ¡En la CTCE de RS, un sector masivo de trabajadores, este método transformó la unidad en una prisión de máxima seguridad! Eso se hizo poco a poco, como quien no quiere nada, y con la connivencia y omisión del sindicato, ligado al PT/PSTU.

Hace algún tiempo se prohibió a los trabajadores ingresar al sector laboral con celulares. Los teléfonos celulares son un elemento fundamental para la comunicación entre individuos, incluso para emergencias, pero, en esa unidad, solo los gerentes pueden portarlos, y también ellos son empleados de la empresa. En otras palabras, viola la premisa de la isonomía. Ante una eventual emergencia, ya sea familiar o de otro tipo, el trabajador solo sabrá lo sucedido cuando abandone el área de trabajo y pueda rescatar su dispositivo secuestrado por el supervisor. El teléfono “puesto a disposición” para este fin nunca funciona.

Otro problema son los detectores de metales, estilo puerta y regla, en la entrada al sector de trabajo, que provocan una situación de vergüenza y muchas veces de humillación, ya que los trabajadores siempre son tratados como posibles ladrones.

Finalmente, la instalación de puntos electrónicos y torniquetes. La regla que está por implementarse es que los retrasos y los certificados médicos deben ser justificados a través de los canales virtuales de la empresa por el propio empleado. Esto los pone en la obligación de hacer el servicio que corresponde a RRHH, es decir, acumulación y desviación de función. El jefe no registra sus horas y, por tanto, vuelve a recibir un trato privilegiado, lo que viola el principio de isonomía. Los torniquetes fueron colocados en lugares donde hay circulación constante de empleados, tanto dentro como fuera del edificio o del sector de trabajo, presentando una práctica de hostigamiento en la que la gerencia controla cada paso del empleado. En el resto de unidades no existen estos mecanismos, violando, de nuevo, el principio de isonomía.

¡El descontento de los trabajadores es claro! Muchos han contraído o empeorado sus cuadros de depresión y otros trastornos psicológicos, debido a la constante presión a la que son sometidos. Por no hablar de las pésimas condiciones de trabajo, con sillas rotas o inexistentes, mesas demasiado bajas, etc…, que enferman físicamente a los empleados. Los Correios no invierten en eso, ya que gastan el dinero en equipos de control social y acoso moral.

La dirección de la empresa quiere acosar a los OTT hasta que no aguanten más y pidan demisión. Una clara política de desguace que lleva más de 20 años y que tiene como agentes a todos los gobiernos de turno. De FHC, Lula, Dilma y Temer a Bolsonaro. ¡Todos son responsables!

Al mismo tiempo, vemos a la dirigencia sindical de la categoría resumir su accionar en la agenda legal, que ya sabemos que es contra los trabajadores, y en las elecciones, diciendo que habrá un “salvador de la patria”. Sabemos bien lo que representó este “salvador” llamado Lula para Correos y sus empleados. Estamos radicalmente en contra de Bolsonaro, pero no confiamos en ningún otro candidato. Es necesario luchar contra la explotación y el acoso en el campo de la lucha directa, que fue y es donde siempre hemos obtenido victorias. Un camino que nuestro sindicato ha abandonado. Y que es urgente que retomemos!

*Exigimos condiciones laborales dignas*

*Considerando que hay cámaras de seguridad por todas partes: exigimos el cese inmediato de la vergüenza de los allanamientos y la restricción del uso de celulares*

*CTCE necesita más trabajadores y no ser tratados como sospechosos*

*No más acoso en CTCE de Correo*